Perros de asistencia vs perros de terapia: ¿qué son y en qué se diferencian?

El Hospital 12 de Octubre ha ampliado su programa de Intervenciones Asistidas con Perros a niños con tumores cerebrales, mediante sesiones semanales que buscan mejorar su recuperación neurocognitiva, bienestar emocional y motivación mediante el vínculo de los animales. La iniciativa fue anunciada el 14 de mayo de 2024.

Tanto los perros de asistencia y los perros de terapia cumplen funciones muy importantes en el acompañamiento y mejora de la calidad de vida de las personas, pero no son lo mismo ni cumplen el mismo rol. Te explicamos en que se diferencian:

Perro de asistencia Perro de Terapia
Función principal Ayudar a UNA personas con discapacidad a realizar tareas diarias Brindar bienestar emocional y apoyo durante visitas o terapias
Entrenamiento Obediencia básica, tareas específicas y socialización entornos reales Obediencia, sociabilización y tolerancia al contacto físico y emocional
Usuario Acompaña siempre a la MISMA persona con discapacidad Trabaja con un profesional y forma parte de un equipo terapéutico
Relación con el usuario Relación uno a uno; el perro es esencial para la autonomía Interacción con MULTIPLES PERSONAS durante las sesiones
Acceso a lugares públicos Permitido por Ley (hospitales, transporte, restaurantes…) No tiene acceso especial por ley
Normativa general Regulados por leyes específicas de discapacidad No estas regulado legalmente en muchos países
Ejemplo de tareas Guiar a personas ciegas, alerta de convulsiones, abrir puertas… Brindar calma en hospitales, colegios, residencias de ancianos…

¿Qué es un perro de terapia?

Un perro de terapia es un animal que participa en Intervenciones Asistidas con Animales (IAA), en contextos terapéuticos, educativos o sociales. Su presencia facilita la mejora emocional, cognitiva, motora o social de las personas que participan en estas sesiones.

No trabajan de forma autónoma, sino que siempre actúan bajo la supervisión de un profesional (psicólogo, terapeuta ocupacional, logopeda, educador…) y forman parte de un equipo terapéutico.

¿Qué tareas realiza un perro de terapia?

Los perros de terapia no están adiestrados para realizar tareas funcionales como los perros de asistencia, sino que su rol es emocional y relacional. Entre sus funciones más comunes destacan:

  • Reducir el estrés y la ansiedad en pacientes hospitalizados o en tratamiento psicológico, reducción del cortisol y aumento de la oxitocina.
  • Fomentar la comunicación en personas con dificultades de lenguaje o autismo.
  • Estimular la memoria y el movimiento en terapias con personas mayores o con enfermedades neurodegenerativas.
    • La revisión de 2019 en Frontiers in Psychology sobre Intervenciones Asistidas con Animales (IAA), analiza los beneficios de la terapia con perros en pacientes con Alzheimer.
  • Aumentar la motivación y la participación en contextos educativos.
  • Favorecer la autoestima y el vínculo emocional en personas en situación de vulnerabilidad (por ejemplo para colegios afectados por la DANA).

Purina, en su web oficial, destaca cómo los perros de terapia ayudan a mejorar el bienestar emocional de pacientes en hospitales, residencias o escuelas, y señala su utilidad en entornos clínicos y sociales: Purina - Clases de perro de terapia y asistencia.

Acceso legal:

A diferencia de los perros de asistencia, los perros de terapia no tienen acceso garantizado por ley a espacios públicos de forma libre.

  • Solo pueden entrar a lugares como hospitales, colegios o centros sociales cuando existe una autorización previa y un convenio con la entidad que organiza la intervención.
  • No acompañan al usuario fuera del entorno terapéutico.
  • No tiene la misma protección legal que los perros de asistencia o servicio.

Por lo tanto, aunque su labor es fundamental, no se deben confundir con perros de asistencia ni exigir acceso público en su nombre.

Entrenamiento:

El entrenamiento de un perro de terapia se centra en la obediencia, la sociabilización y la tolerancia al contacto físico y emocional. Deben ser perros equilibrados, pacientes, dóciles y con alta capacidad de adaptación a distintos entornos.

Principales requisitos de un perro de terapia:

  • Buen temperamento, sin miedo ni agresividad.
  • Capacidad de trabajar con distintos tipos de personas (niños, ancianos, personas con discapacidad).
  • Respuesta estable ante estímulos intensos (ruidos, movimientos bruscos, entornos clínicos).
  • Educación básica sólida (sentarse, acudir a la llamada, caminar con correa sin tirar).
  • Habilidades avanzadas (dar la pata, girar, saltar, traer cosas…).

Varios países cuentan con certificación en Intervenciones Asistidas con Animales, así como programas de evaluación para los animales y sus guías. En Europa destacan organizaciones como ISAAT - International Society for Animal Assited Therapy y ESAAT - European Society for Animal Assited Therapy, que establecen estándares de formación y acreditación.

¿Qué es un perro de asistencia?

Un perro de asistencia es un animal adiestrado para ayudar de forma directa a una persona con discapacidad. Estos perros realizan tareas específicas que permiten a su usuario tener una vida más autónoma, segura e independiente.

Dentro de los perros de asistencia, encontramos los siguientes:

  • Perros guía.
  • Perros de señal.
  • Perros de alerta médica.
  • Perros de servicio.
  • Perros de apoyo.

Estos perros tienen un entrenamiento especializado, personalizado y certificado, orientado a compensar las limitaciones físicas (por ejemplo movilidad reducida), sensoriales (por ejemplo por discapacidad visual y/o auditiva) o mentales de su usuario (TEA, epilepsia, trastornos de ansiedad).

¿Qué tareas puede realizar un perro de asistencia?

  • Guiar a personas con discapacidad visual (o perros guía). Como por ejemplo: la Fundación ONCE Perro Guía
  • Alertar a personas con discapacidad auditiva (o perros señal).
  • Detectar crisis médicas, como hipoglucemias, ataques epilépticos, episodios de ansiedad (o perros de alerta médica).
  • Prevenir crisis en personas con trastornos del especto autista (TEA), esquizofrenia o problemas mentales graves (o perros de servicio ).
  • Ayudar en la movilidad (por ejemplo, abrir puertas, recoger objetos, empujar sillas de ruedas) (o perros de servicio).
  • Dar soporte emocional (o perro de apoyo).

Acceso legal garantizado:

En España, los perros de asistencia están protegidos por leyes específicas que garantizan su acceso a lugares públicos y privados de uso colectivo, como transporte, hospitales, centros educativos , tiendas o restaurantes. Este derecho está respaldado por la Ley 10/2023 de perros de asistencia en España.
Fuente oficial: Boletín Oficial del Estado - BOE

Entrenamiento:

El entrenamiento de un perro de asistencia tiene una duración aproximada de 2 años y es riguroso en cuanto a rutinas. Incluye obediencia básica, tareas específicas y socialización en entornos reales. Solo centros especializados con profesionales certificados pueden desarrollar este tipo de entrenamiento con garantías.